Por: Redacción
Miércoles, 22 de enero del 2025
El Telescopio Espacial Hubble ha logrado un hito en la astronomía al crear el fotomosaico más grande jamás realizado, capturando la galaxia de Andrómeda (M31) con una resolución impresionante. Este proyecto, que tomó más de 10 años y requirió la recopilación de más de 600 imágenes, permite a los astrónomos estudiar 200 millones de estrellas de la galaxia con un mosaico que alcanza los 2.500 millones de píxeles.
Ubicada a 2,5 millones de años luz de la Tierra, Andrómeda es la galaxia espiral más cercana a la Vía Láctea y ha sido un foco clave para los estudios astronómicos desde que Edwin Hubble demostró que no es una nebulosa dentro de nuestra galaxia, sino una galaxia independiente.
El Hubble ha capturado detalles excepcionales, revelando patrones de formación estelar y eventos pasados, como fusiones galácticas, a través de múltiples longitudes de onda (ultravioleta, visible e infrarrojo cercano). Las imágenes también permiten identificar cúmulos de estrellas jóvenes, como el NGC 206, y observar áreas densas de polvo oscuro en el disco galáctico.
Este fotomosaico abarca la mitad norte de Andrómeda, con el estudio ampliado en el sur por el programa PHAST. Las observaciones revelan la compleja historia de Andrómeda, que incluye interacciones con galaxias satélite, como Messier 32, que pudieron haber alterado su estructura y desencadenado formación estelar.
Este avance no solo amplía el conocimiento sobre Andrómeda, sino que también sienta las bases para futuras investigaciones utilizando telescopios avanzados como el James Webb y el Nancy Grace Roman, que ofrecerán aún más detalles sobre las galaxias espirales y su evolución. Además, este mosaico ayudará a entender el destino galáctico de Andrómeda y la Vía Láctea, que se predice que colisionarán dentro de 4.500 millones de años, formando una estructura galáctica elíptica.