Por: José Sobrevilla (Premio Nacional de Periodismo 2023)
Lunes, 9 de junio de 2025
Visión política de Estado en medios públicos, lo que necesita Sheinbaum
· Entrevista con Samuel Adrián Muñoz Gómez, ex director del Sistema de Radio y Televisión del Congreso de Jalisco
· Por primera vez, los medios públicos pudieron estar al mismo nivel que los medios públicos con la llegada de la Comunicación Política de la Cuarta Transformación.
Para los medios públicos, la comunicación política del gobierno de Andrés Manuel López Obrador a través de las conferencias matutinas, fueron cosa nueva, pero lo relevante era (y es) que podían enviar a su reportero con las mismas posibilidades de acceso que cualquier otro medio. Hablamos de medios públicos nacionales con mayor impacto, comenta Samuel Muñoz; éstos, fueron los que tenían mayor posibilidad de acceso al presidente y a los titulares de las secretarías porque, en las mañaneras, el expresidente se hacía acompañar continuamente de ellos, aseguró.
“Ahí matabas dos o tres pájaros de un solo tiro, pues estaban los que necesitabas para hacer una nota completa, lo que significaba un elemento informativo de mucho valor: los medios públicos por fin estaban al mismo nivel que los privados, en las mismas condiciones, en iguales circunstancias, y esto, nos ponía en un lugar interesante”, comentó desde Jalisco Samuel Adrián Muñoz Gómez, quien fuera presidente de La Red de Radiodifusoras y Televisoras Educativas y Culturales de México y, hasta 2024, director del Sistema de Radio y Televisión del Congreso de Jalisco.
A mí me tocó, cuando fui director del Sistema Público de Televisión, sobre todo en la época inicial, porque veníamos de anteriores sexenios donde, primero, −hay que decirlo abiertamente−, los medios de Jalisco eran Televisa, Azteca; y periódicos, prácticamente dos o tres: Milenio; a través de Reforma, Mural, y El Informador que ha sido por décadas el periódico histórico en el Estado, y fuera de ahí nada; nos costó mucho trabajo que también al Sistema Jalisciense se le diera la misma importancia; pero era un tema de sensibilizar al gobernador, a los secretarios, etcétera; y aquí la línea de un trato equitativo, venía desde el titular del gobierno de Jalisco.
Me parece que, a los medios públicos, al tener ese acceso informativo, la posibilidad de traer comunicación, se les venía otro aspecto: transmitir. Algunos, sobre todo los de servicio público divulgaban la mañanera, otros tomaban informativamente lo que necesitaban para sus noticieros y demás; fue el Sistema Público de Radiodifusión de Estado Mexicano, el SPR, quien inició con las transmisiones de las mañaneras, igual que otros canales, digamos con un impacto nacional, como los canales 14 del SPR, Canal 11, entre otros, los que también replicaban la señal de las matutinas.
Creo que también para los auditorios, desde esa perspectiva, surgieron críticas, que “si esto era válido”, que “si no irrumpía con ese editorial, de que un medio público debe no ser servil al gobierno”, etcétera (…) pero bueno, finalmente estaban haciendo un servicio público; es decir, la gente de repente no tiene satélite y para muchos ciudadanos que no tienen acceso a otras herramientas, los servicios de televisión abierta siguen siendo de gran impacto (económico); sobre todo para quienes no pueden pagar una televisión restringida. Finalmente, los medios públicos transmitían lo que el presidente contestaba a los reporteros.
Los medios de comunicación, particularmente privados, se habían acostumbrado a determinar cuáles serían los temas semanales: los lunes publicaban lo que sería el tópico de cada periódico, de cada medio, durante los anteriores períodos; y los poderes tenían que adaptarse a esos temas; sin embargo, con López Obrador era al revés; aquí, desde la presidencia de la República −a través de su titular− se determinaba cuáles tendrían que ser esos temas; él los decía de una manera muy sencilla, en qué consistían, y por donde iba a estar la agenda informativa de esa semana.
Sabemos perfectamente que los medios de comunicación, particularmente privados, determinaban los temas de acuerdo a sus propias agendas: económicas, políticas, intereses, etcétera, no tanto por el tema del ciudadano o por lo que interesaba al pueblo, sino más bien lo que importaba a ellos que el pueblo supiera o se les informara, y entonces ahí involucrar a los diferentes entes políticos y de gobierno.
Con AMLO de presidente, había finalmente una apertura hacia los medios de comunicación; o sea, estaban ahí enfrente y se podía preguntar, más allá de que si había periodistas ‘a modo’, de que preguntas esto, o lo otro; finalmente cuestionaban todos, y cierto o no, finalmente el de Televisa, el de aquí, el de allá, el de Azteca, todos generaban sus propios cuestionamientos y tenían la apertura de poderlos hacer.
Entonces, la televisión abierta proporcionaba ese servicio, porque finalmente no editorializaba; se transmitía íntegro lo que sucedía ahí; no se cortaban ciertas preguntas, ni mucho menos, se transmitía tal cual era; entonces, me parece que al contrario, los medios de servicio público estaban siendo finalmente aprovechados por el propio Estado para transmitir lo que el presidente contestaba a unos y a otros, o preguntas difíciles, o preguntas a modo, lo que fuera, pero finalmente la información estaba accesible para la ciudadanía. A mí eso me parece interesante.
Como todo lo nuevo, vino la resistencia al cambio y demás, pues después de eso llegamos a observar otra etapa donde hasta medios comerciales se estaban enlazando a la mañanera, ¿por qué?, porque era muy redituable.
Tengo un hijo, jovencito, que en aquel tiempo, como a todo adolescente, ya sabes, le interesaban cosas de influencers… y −un día− me dice: “oye papá, fíjate que, ¿quién crees que ganó (no sé qué) premio en España, pues que se lo van a dar a López Obrador… por los no sé cuántos viewers (los que se conectan y ven…)”, y entonces me comentó de un español, que era el influencer que regularmente ganaba el primero o segundo lugar, y que había sido desplazado a segundo término por López Obrador, quien estaba haciendo transmisiones en vivo. El tema es el impacto que tuvo con la gente.
Y de aquí viene otro elemento de reflexión, que es el paradigma que fue completamente roto, y es cómo una información política, a todas luces, y bueno mi hijo es parte de eso, también la política le interesa a un joven, aunque a la mayoría les aburre, hasta también se involucraron en ese asunto, porque el presidente López Obrador se hizo famoso entre los influencers que le dieron una mayor difusión, y que muchos se metieron a partir de eso, a ver ‘qué pasa con el presidente mexicano’; se involucraron para ver qué sucedía y bla, bla, bla.
Es decir, estamos hablando también, porque no decirlo, de un fenómeno mediático, de influencer, (o ya no sé cómo llamarle), con estos nuevos diálogos digitales, pero también pasó a ser una cosa, que estaba fuera del alcance, de lo lógico, hasta ese momento, porque la comunicación política, de un ‘oficialista’, si quieres llamarle así, como era visto por tantas miles y miles de personas, no de que después se grabó y se transmitió el vídeo, sino en vivo, o sea, eso es lo que me parece llamaba mucho la atención de propios y extraños, del fenómeno que construyó esta iniciativa de las famosas mañaneras.
-En comparación con otros sexenios, ¿Cómo fue el movimiento presupuestal que recibieron los medios públicos con López Obrador?
No tengo un dato exacto, pero sí una idea general: no hubo gran diferencia; o tal vez una: digamos la reconstrucción de la función de los medios públicos desde una perspectiva, me parece, más abierta, con mayor apertura informativa, pluralidad; pero financieramente hablando yo no vi grandes diferencias. Se dieron inversiones importantes para cuestiones técnicas, sobre todo en el SPR, que tuvo un crecimiento importante a través de la construcción de plantas para transmitir la señal en diferentes lugares de la República.
Ahí, técnicamente, digamos, hubo una inversión que sí marcó diferencias con los anteriores sexenios, una visión más nacional que centralista, y era lo que se esperaba anteriormente; y te lo digo como ciudadano de provincia: sí estaba muy centralizado el tema de la inversión del Ejecutivo hacia los medios como Canal 11, Canal 22, el propio SPR, Canal 14, y otros más; sin embargo, con esta visión mucho más nacional, incluyente, el SPR pudo poner algunas plantas importantes.
A nivel de los medios locales, regionales, estatales, pues lo que siempre ha sucedido, de acuerdo al gobernador que llegue, el interés que tenga sobre su medio público, pues todas las inversiones que se hacen, me parece que a nivel general, no hubo grandes diferencias; en Jalisco no las hubo, por ejemplo, con el sistema de televisión, ni con el canal de la universidad de Guadalajara, más o menos lo que se venía invirtiendo también se hizo en el sexenio anterior, entonces me parece que no hubo grandes diferencias en los medios públicos.
−En Jalisco, ¿cómo fue recibida la desaparición del sistema de noticias del estado mexicano Notimex?
Fue como extraño. Algunos directores fueron incluso enérgicos en la crítica hacia la desaparición de Notimex, pero no te creas que hubo gran sorpresa, porque la Agencia, hasta cierto punto, ya no jugaba el rol informativo que en otros tiempos tuvo como protagonista de la información. Desde esa perspectiva me parece que algunos estábamos ciertos, entre ellos yo, de tener ciertas dudas del impacto real que tenía Notimex; y muchas veces las instituciones −como las personas− cumplimos ciclos, y que probablemente haya sido un ciclo que se haya cumplido en una misión que, en su momento, definitivamente sí había dado resultados, y sí tuvo una función interesante informativamente hablando, pero que, en los últimos años, sinceramente había pasado muy desapercibida.
Te estoy hablando que fui director del General de 2007 a 2013 y, escasamente utilizamos información de Notimex; o sea, para alguna cuestión muy particular, pero realmente desde esos años Notimex no fungía, digamos, no tenía el impacto, la fuerza y demás que tenía anteriormente.
− ¿Cómo son nombrados los directivos en los medios públicos?
A veces, a los medios públicos se manda al que anduvo en la campaña y ya no sabemos qué darle. A aquí, en Jalisco, llegó un director que −originalmente− iba para comunicación social (…) pero cuando llega el gobernador y le dice, “oye, ¿qué crees?, por cuestiones internas, de grupos, tengo que poner a ‘Juan Pérez’, y no te puedo poner a ti”; oye gobernador, pero: “ya habíamos quedado, yo trabajé la campaña con esa misión, yo traigo el contacto con los directores de los medios…” “No hay vuelta de hoja. Tú, te vas al sistema jalisciense, que también es de comunicación, de medios, y desde ahí me ayudas” (…) Y lo mandan.
(…) Pero ¿qué pasa cuando llega de director del medio público alguien que no sabe nada, pero que anduvo en la campaña, o porque es primo de no sé quién …? Que de aquí a que agarra la onda, ¿qué va a suceder?, hasta que se da el periodo de improvisación, y de proyectar, si es que sabe hacerlo, ya se fueron dos años, y ya le quedan cuatro, pero si además hay otros distractores, también políticos de las campañas: que ya llegan a las intermedias, no bueno, olvídate, estamos hablando de una pérdida total de tiempo y dinero, y de impacto de ese medio público, estatal o nacional.
−¿Qué nos espera en medios públicos con Claudia Sheinbaum?
Yo creo que si la presidenta logra tener una visión de Estado en cuanto a lo que debe hacer cada uno de los medios públicos nacionales, como Canal 11, Canal 22, el SPR, Canal 14, como parte del SPR, se podría tener un diálogo con el rector de la UNAM, no sobre lo que debería ser la UNAM (…) veo como visión de Estado, no desde una perspectiva de control, sino desde, como lo hizo en su momento el gobierno de alemán, cuando dijo “quiero hablarle al mundo desde Alemania, quiero decirle al mundo cómo lo veo, lo que veo desde Alemania, y que el mundo nos vea a los alemanes desde la perspectiva del gobierno actual”, y esa televisora hoy día se llama Deutsche Welle, DW.
Cuando hay una visión de Estado, dices bueno, creo que los recursos se pueden eficientar hacia el objetivo a donde queremos llegar y, obviamente, con los gobernadores también: un diálogo desde la presidencia de la República, de lo que deben de ser los medios públicos en México, porque la verdad es que nos quejamos de que no hay dinero, pero a mí se me hace que sí hay, lo que hace falta es saber cómo invertir esos pocos recursos de la mejor manera, y para eso se requieren conocimientos, experiencias y demás.
Aún con los directores o directoras que están, algunos con mucha experiencia y otros con ninguna, cuando hay una visión de lo que debe ser un medio de servicio público, como si fuera manualito, nos ayudaría a cumplir cosas. La presidenta de la República, −lo voy a decir de esta manera− tiene una gran oportunidad si lo ve desde diferentes estructuras, como si fuera una pirámide, primero, a dónde quiero llegar; qué quiero que sean los medios públicos en México; que vayan de manera equitativa al recurso que se les da, y se haga una reingeniería. Si se hiciera una reingeniería medio por medio, saldrían cosas increíbles, como para trabajar hacia el futuro, según el nivel; después de hacer esa reconsideración, y la función que deben tener los medios públicos, la segunda estructura de la pirámide, sería las políticas públicas, a generar una política pública de los medios públicos.
Para eso necesitamos una reforma que, por cierto, ahorita está precisamente la de telecomunicaciones, que ya ha generado cierta ola de comentarios, críticas, análisis, y eso me parece maravilloso. Es increíble que todos opinen, claro, ya sabemos quiénes van a opinar, porque afecta a sus bolsillos, pero también están los que van a opinar pensando en la ciudadanía, en la comunicación, y en hacia dónde deben ir. Esta ley puede ser un pretexto para repensar lo que debe ser la comunicación en México, en general, y la misión de Estado con los medios de comunicación; así como el rumbo que deberán tener los medios públicos. VER VIDEO
Entrevista realizada desde CDMX a Jalisco el 1º de mayo de 2025 vía WhatsApp